Ya estamos a menos de un mes de uno de los objetivos más esperados por muchos cicloturistas: la Luchon - Bayona.
Allí acudiremos unos cuantos para volver a saborear el must de los Pirineos: el Círculo de la Muerte, la Ruta de los Cols, o sea, el encadenamiento de los puertos de Peyresourde, Aspin, Tourmalet, Soulor y el Aubisque.
Ya os expliqué en un post anterior (http://agonistic.blogspot.com/2007/11/la-luchon-bayona.html) el origen de esta soberbia marcha cicloturista que se remonta a 1910, época de exploradores. Y es ese origen histórico, de la época mítica del Tour de Francia, lo que hace tan atractiva esta marcha y lo que hace que, pese a la dureza objetiva del recorrido (por mucho que se pueda hacer en dos días), seamos tantos los que deseemos coronar uno tras otro estos puertos legendarios.
Y por fin, cuando ves a lo alto la casa que corona el Aubisque, el último de los grandes del recorrido, sabes que lo peor está hecho, que ya "casi" has conseguido vencer el reto. Porque lo que queda desde ahí hasta Bayona ya es mucho más fácil.
En la Transpirenaica que hice en 2006 y que repetiré este año con Giant Tours también sabes que lo más duro queda atrás cuando allá a lo lejos aparece el Aubisque, el último grande en el que Octave Lapize acusó de asesinos a los que diseñaron un recorrido así.
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