sábado, 19 de enero de 2013

Sí, era un capullo arrogante

Sí, era un capullo arrogante


http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=OoRcCvWy7b4

Cuando Armstrong dominaba el Tour fui cogiéndole un poco de manía por su chulería y algunos gestos que tenía con los que no le caían bien. Lo acaba de confesar él mismo. Sí, en aquellos años me parecía un capullo arrogante, y lo era.
Cuando se retiró ya me caía un poco mejor. Me parecía el más profesional de todos los grandes ciclistas de su época. Ya se decía entonces que lo que Lance había conseguido era un método infalible de doparse sin que le pillaran, y más o menos todo el mundo aceptaba que todos los grandes de la época tomaban las mismas cosas. Por lo tanto, si Lance ganaba es que era el mejor de todos.
No sé si eso era cierto. Jan Ullrich siempre me pareció el más fuerte físicamente de los ciclistas de esos años. Ullrich se vio envuelto en la Operación Puerto, ese engendro chapucero de limpiar el deporte en España que solo sirvió para cargarse la carrera de muchos ciclistas pero que no solucionó nada y dejó todo a medio hacer (¿Qué fue de las decenas de bolsas de sangre que no eran de ciclistas?). Pero no estoy seguro de que si Ullrich hubiera tomado lo mismo exactamente que Lance (o un poco más) hubiera ganado esos Tours en los que quedó segundo.
Porque, no lo olvidemos, Lance no ganó los Tours porque iba más dopado que los demás. Eso puede servir para ganar uno (como Riis). Pero dominar una carrera tan complicada durante siete años no es solo cuestión de tener una ventaja física ante los demás (que para Lance no era ventaja, como ha confesado, sino ponerse en igualdad de condiciones), sino de tener el mejor equipo, saber elegir la mejor estrategia, ser el más listo en muchas ocasiones, saber dónde atacar y dónde no para ahorrar fuerzas, tener una increíble suerte durante siete años,... En fin, que hay que ser el mejor en todo para ganar el Tour siete años seguidos y hay que ser muy profesional para entrenar perfectamente durante todo esos años. Cuando Lance terminaba un Tour ya estaba preparando el siguiente, viendo dónde habían fallado, viendo qué podían mejorar, experimentando con nuevas tecnologías para las bicicletas, la ropa, todo.
No basta con ser el más fuerte. Cuando Fignon perdió el Tour'89 ante Lemond por 8 segundos el último día de montaña se sentía muy fuerte y a punto estuvo de lanzar un ataque de lejos, algo que seguramente le hubiese supuesto más ventaja sobre Lemond y hubiera ganado el Tour. Pero Fignon y su director Guimard decidieron no atacar. Era el más fuerte, pero perdió.
Hay detalles, anécdotas, que muestran hasta qué punto Lance y su equipo eran profesionales y detallistas.
Viendo las etapas pirenaicas las semanas previas a uno de sus Tours, el US Postal coincidió con el T-Mobile en la misma zona y Lance quedó con sus compañeros para subir temprano al día siguiente uno de los finales en alto que les quedaba por reconocer y así al bajarlo se cruzarían con los alemanes, y cuando estos bajaran el puerto Lance y sus chicos habían quedado en subirlo otra vez, para impresionarles y hacer un poco de guerra psicológica.
Pero resulta que al bajar no vieron a los del T-Mobile por ningún lado. Sabían que no lo había subido esa semana, por lo tanto estaban convencidos de que lo subirían ese día, pues era su último día en la zona antes de ir a una carrera importante.
Uno de los compañeros de Lance comentó que ya se podían ir al Hotel, pero Lance dijo que no, que habían dicho que lo subirían dos veces y así lo hicieron. Luego se enteraron de que el T-Mobile se había marchado pronto para no perder un vuelo.
Ésa era una de las diferencias. Mientras Ullrich era capaz de marcharse sin reconocer una de las subidas más importantes de ese Tour, Lance la subió dos veces.
Sí. Ullrich era un portento físico, pero el cerebro de Armstrong era mucho más fuerte y mucho más ágil, y capaz de aguantar lo que otros no aguantaban, tanto en los entrenos como en las carreras.
Cuando en 2009 Lance regresó al Tour ya no me parecía un chulo arrogante. Ya estaba mucho más suave con los medios y ya hasta me caía simpático. Su tercer puesto en París me pareció un logro deportivo fantástico tras dos años parado. Casi más que sus victorias. Sí, ya sé que logró el tercer puesto por llevar la carrera bloqueada mucho tiempo, pero solo alguien como Armstrong era capaz de hacerlo.
Viendo la entrevista de Lance con Oprah Winfrey creo que ha hecho lo mejor. Podía haber callado y dejar para siempre la pequeña duda de si era cierto o no lo que se decía de él. Pero así, confesando y mostrando arrepentimiento y diciendo a todo el mundo que antes él era un chulo arrogante, ha dado un paso importante para que el ciclismo aclare de una vez y para siempre aquellos años oscuros en los que era muy difícil ganar si no ibas dopado.
El mismo Fignon en su libro "Éramos jóvenes e inconscientes" (en castellano lo tenéis en Cultura Ciclista) confiesa el dopaje que había en sus tiempos, y al que él recurrió en algunas ocasiones. Pero dice que todo cambió con la llegada de la EPO, un producto que daba una ventaja hasta entonces desconocida y que no se podía detectar, o sea, una invitación a tomarlo. A partir de ahí, dice Fignon, el que ganaba no tenía por qué ser el mejor, y pone el ejemplo de Bjarne Riis, que ganó el Tour.
Ojalá confesaran todos como lo ha hecho Armstrong. Ciclistas y otros deportistas, que parece que para muchos solo hay dopaje en el ciclismo. Ya que estamos de revisión, pues a revisar todo el deporte a lo largo de la historia.
Sí, Lance era un capullo y un chulo arrogante, y es culpable de muchas de las cosas de las que le acusan. Pero, como dicen algunos (http://www.biolaster.com/blog-ciclismo/649) Lance también es una victima de su época. Una víctima que ganó mucho dinero y que se enfrentó a muchos inocentes.
Otras víctimas también ganaron dinero y han salido más airosas de esos años. Bueno, es normal que se cebaran en investigar a Armstrong, él era el más poderoso y él mismo reconoce que le parece normal que hayan ido a por él.
Para terminar quedémonos con lo positivo. Lance se ha mostrado arrepentido y se ha portado como un caballero al no acusar a nadie de sus faltas y de sus errores. Tampoco la entrevista con Oprah era el lugar para contar lo que sabe. Estoy seguro de que lo contará ante quienes tenga que hacerlo. Lance es un tipo duro, y creo que ha tenido que ser difícil para él decir delante de todo el mundo, de sus hijos, que ha sido un tramposo y un mentiroso. Tampoco hay que olvidar que cualquier otro, con todo el dinero y el poder que ganó, podía haberse dedicado a ser un rico egoista y sin embargo Lance creó su fundación Livestrong con la que ha ayudado a muchísima gente. Y por último, creó que éste va a ser el punto de inflexión en cuanto a la imagen del ciclismo. Ya más bajo no se puede caer ante el público en general. Lance ha abierto de par en par una puerta, la de la confesión, que ya habían entreabierto otros. Pero todo lo que hace Lance tiene mil veces más repercusión, así que espero que ya confiesen los que tengan algo que confesar y a partir de aquí la imagen del deporte más bello del mundo remonte de nuevo.

20 comentarios:

Joseba dijo...

No considero que se vaya a dar un punto de inflexión. El ciclista profesional es un tipo que entrena muy duro muchas veces por muy poco dinero y seguirá creyendo en los que le aseguren que esto o aquello no se detecta todavía y te da un puntito más. Hay Egoísmo y Codicia. Lo mejor es dejarles aparte, que se arreglen entre ellos, que elijan lo que quieren ser y hacer. Lo nuestro es otra cosa.

Manu Arregi Biziola dijo...

Me ha gustado el artículo. Apropiado lo que dices y como lo dices.Sobre que va a venir bien abrir las ventanas...¿para qué? ¿Por qué solo en ciclismo? ¿Por qué creéis que las redadas antidopaje en Spain acaban en nada? ¿Por qué Eufemiano sigue libre como un pájaro? ¿Por qué se diluyó todo aquello de Marta Dominguez? Si se va a hablar, que hablen todos los deportes.

Javier Sánchez-Beaskoetxea dijo...

Yo hablo de que confiesen todos los que tangan algo que decir en todos los deportes. Hoy mismo he leído que Zidane ha reconocido que se dopó. De todas formas con lo del punto de inflexión me refiero a la imagen que da al exterior, al público en general que no sigue el ciclismo. Yo creo que cuando pase el boom de lo de Armstrong ya peor imagen mundial negativa no se puede dar.

Anónimo dijo...

El artículo está bien, pero afirmar que es un caballero por no denunciar es precisamente el camino para que esto no se pare y siga a sus anchas toda la infraestructura del dopaje. No veo que no denunciar a delincuentes se una demostración de señorío; se ha de pensar en los jovenes para que lleguen hasta donde puedan, pero con salud y con todos en las mismas condiciones.

Javier Sánchez-Beaskoetxea dijo...

Digo que se ha portado como un caballero en esa entrevista, no que lo fuera. Para ser un caballero toda su vida tendría que haber transcurrido de otra forma, visto lo visto. De todas formas, como digo en el artículo, creo que hablará de cómo lo hacía y con quién lo hacía con quien tenga que hablarlo, y en esta entrevista no creo que era el sitio apropiado.

Anónimo dijo...

no es justo que se castigue a armstrong cuando todo el mundo sabia que se comercializaban metodos y substancias dopantes , lance era uno mas de todo un peloton dopado esa es la unica verdad ,y si no pregunte a directores de equipo, cilistas, mecanicos, masajistas , etc todo el mundo del cilismo lo sabia y por cierto armstrong no era un capullo era el mejor de todos

Anónimo dijo...

Pedimos que confiesen los ciclistas como si fueran criminales mientras... para otras cuestiones mas duras, mucho mas duras, nuestras moral se hace mas relativa, menos fiscalizante, se relaja. Viva la demagogia

Javier Sánchez-Beaskoetxea dijo...

No estoy de acuerdo con esta generalización. El que en este post y en estos comentarios no hablemos de otros problemas de la sociedad no significa que no nos preocupen. Y yo no pido que confiesen como si fueran criminales (que no lo son), sino que si con eso podemos empezar de cero y ayudar al deporte en general (y al ciclismo en particular que es el que está más castigado por la mala imagen y es el que más me gusta) pues perfecto.
Esto es como el que acusa a los que se manifiestan contra los toros que no lo hacen contra las injusticias sociales. Uno puede manifestarse contra una cosa un día, y al día siguiente contra otras.
Yo contra otras cuestiones más duras soy mucho más beligerante que contra este tema del deporte y el dopaje, pero eso no significa que en este blog, como lo tengo dedicado principalmente al ciclismo y al cicloturismo, no pueda hablar sobre él y en otros ámbitos de mi vida hablar de los otros problemas de la sociedad.

Anónimo dijo...

No estoy de acuerdo Javier. Sigues justificando lo injustificable. Eres un fanatico de Armstrong y eso te ciega la vista. Sigues diciendo que Armstrong estaba igual de opado que los otros y que gano los Tours porque era mas inteligente y mas profesional. No es asi. Lo que esta claro es que Armstrong estaba MEJOR dopado que todos, con el medico que mas sabia y con, parece ser asi, EPO experimental y de nueva generacion. Me decepcionas. Creia que despues de el informe USADA y de la entrevista, habrias visto la realidad pero veo que sigues justificando todo lo malo de Armstrong. Que la llames victima ya es de verguenza. Es tu opinon y haces con ella lo que quieres pero es una pena Javier.

Javier Sánchez-Beaskoetxea dijo...

Bueno, si te decepciono por no opinar como tú, pues no puedo hacer nada al respecto. Lo peor sería que te decepcionara porque te enteraras de que soy un tramposo, o un delincuente, o que en realidad hice la París Roubaix montado en un coche y engañé a todo el mundo, o que soy un racista y que pego a mi mujer. Lo otro solo son opiniones sobre un tema.

Anónimo dijo...

No me decepciona que opines diferente sino que una persona como tu, que quiere al ciclismo, defiende algo a capa y espada y sin querer darle a este tema los criterios, normales, que se merece y que le das a otros aspectos de tu vida como persona y como ciclista. Al ser un fanatico de Armstrong (de lo cual eres muy libre) pierdes calidad en tu argumento y no le das a este tema el rigor de honestidad que se merece.

Javier Sánchez-Beaskoetxea dijo...

No me considero un fanático de Armstrong. Cuando ganaba los Tours yo me habría alegrado mucho más si el récord lo hubiera conseguido Ullrich. De todas formas, hace muchos años que aunque sea un fan de un ciclista tampoco soy un seguidor ciego de nadie que no conozca personalmente, porque sé que luego puede haber algo detrás que me desengañe, como lo de Arsmtrong, por ejemplo.
Lo que pasa es que hay muchas cosas que a mí me resulta imposible calificar como blanco o negro. ¿Que era culpable? Sin duda ninguna. Pero en parte también es una víctima del sistema que había. ¿Se merece un castigo? Sí, y posiblemente ejemplar por ser él quien es. Pero no creo en la pena de muerte ni en la cadena perpetua.
Si un joven normal y corriente se tiene que hacer un soldado en una guerra de éstas horribles e inhumanas y tras meses de vivir de forma deshumanizada hace una masacre en una aldea por supuesto que es culpable de sus actos, pero en parte también ha sido una víctima de las circunstancias. Es un ejemplo extremo, pero es para que veas por qué yo no soy capaz de decir que alguien es solo culpable y que se merece todos los castigos.
Todo en la vida es relativo y la separación entre lo que es bueno y lo que es malo no la tengo tan clara como tú, por lo que veo.
Respecto al ciclismo, ya he dejado muchas veces claro en este blog y en otros sitios que yo estoy a favor de que las reglas y los plazos estén muy claros y a partir de ahí tolerancia cero con los tramposos. Pero tratando a todos con las mismas reglas, y en el ciclismo que hemos visto estos últimos años todos no han sido tratados igual.

Javier Sánchez-Beaskoetxea dijo...

Por cierto, ¿me conoces personalmente o solo por lo que me lees?
No me importa que se firme como anónimo, para eso está esa opción, siempre y cuando se escriba con respeto, como tú, pero prefiero saber con quién estoy hablando.

Anónimo dijo...

Javier, leo tu blog y tus articulos en Pedalier por lo que no si bien no te conozco en persona supongo que lo que escribes te representa. Me refiero a eso. Veo que eres una persona que respeta este deporte que todos queremos y me sorprende esa defensa a capa y espada. En nuestra tierra ya hay muchos que por fantatismo o ideologia no quieren ver lo ilogico de sus posturas y to defense 'ciega' a Armstrong me parece no coherente con alguien como tu que piensa las cosas y ha visto mundo. Eso es todo.

Ernest dijo...

Yo me lo he pasado muy bien con Amstrong, igual que con Indurain, Pantani, Ullrich, etc.
Muchos años tragando ciclismo y Tours disfrutando como un cerdo. Los recuerdos todavía los tengo y me merecen todo el respeto, hacerme disfrutar tanto no es fácil y ahora no lo quiero olvidar. No me da la gana!!!
No tengo ninguna duda de que Lance era el mejor ciclista de esa década y así lo voy a seguir recordando. Me da mucha rabia que ahora todos los medios me "obliguen" a odiarlo. Periodistas deportivos (?) futboleros que no han visto ni un Tour entero que buscan la noticia fácil, como siempre. Pues no me da la gana, yo no lo voy a odiar ni de coña. Ahora toca aguantar bromas lamentables hasta que la mancha se vaya extendiendo (esto sólo esta empezando) y empiece a salpicar al sagrado fútbol. Entonces ya todo parecerá otra cosa.
La línea del doping está mal colocada y sobretodo con una mentalidad muy puritana e hipócrita a más no poder. Todo el mundo da por hecho que las reglas del doping estan bien hechas y nadie tiene ningún interés en saber nada más.
No se puede utilizar EPO pero si cámaras hiperbáricas que genera EXACTAMENTE lo mismo en el cuerpo. Se prohiben según que cosas para preservar la salud de las personas, pero todos los médicos coinciden que correr un Tour entero no es muy sano. Como tampoco es muy sano bajar a 80 Km/h un puerto lloviendo.
Hay mucha hipocresía. También podíamos hablar de la NBA, del tenis, del sagrado fútbol, etc.... en fin.

A mi también me parece más correcto criticar dando el nombre. Personalmente no respondería a los "anónimos" a los que les das la oportunidad de dar la cara y parece que no se dan por aludidos...

Javier, me gusta lo que has dicho y como lo has dicho. El tema es difícil... hace días que estoy buscando mis propias palabras y me cuesta.
Grácias!! :-)


Viva el ciclismo y el deporte!!!

gabriele dijo...

(1/3) :-P

El artículo es muy interesante, mejor de casi todo lo que haya leído en la prensa (especialmente en Italia, de donde procedo: por cierto, pido disculpas por adelantado por cualquier error de castellano).

Sin embargo, me parece que falla un poco por cuanto considera Armstrong un ciclista más o menos como los otros, si bien con mayor actitud de líder máximo; como ellos también se le califica de "víctima" del sistema.
Estoy perfectamente de acuerdo en utilizar este concepto, si bien con ambigüedades, por lo que atañe a los otros ciclistas, en el caso de Armstrong... la historia es un poco diferente.

Me he leído gran parte de los materiales publicados por la USADA, y aunque yo no crea que se puedan considerar todas verdades, en absoluto, aun así el papel de Lance destaca mucho en comparación con lo que conocemos sobre sus colegas, de su equipo o de otros. Él tenía efectivamente un rol activo y central en decidir, organizar, propugnar, promover y a veces imponer prácticas, médicos y sustancias.

A menudo decimos que no tiene sentido ensañarse en controles y puniciones cada año más locos hacia los ciclistas, cuando en cambio directores deportivos y médicos siguen allí, con impunidad casi siempre total.
Y bien, en el caso de Armstrong se puede decir que él ha sido no solo una pieza del sistema, sino también un motor, y un motor importante.
"Víctima" quizás como deportista, pero sin duda "verdugo" como efectivo jefe de un equipo.

El problema no se limita a esto, porque hay también que reflexionar sobre las relaciones de Armstrong con poderes mayores que el entorno del equipo.

Su fuerza a la hora de condicionar (de forma técnicamente horrible, por cierto) la carrera no dependía solo de su "carisma": de hecho, todo el mundo sabía muy bien que él era amiguito del alma de unos señores bastante poderosos.

Los jefes del Tour, los cuales, tan inlexibles en otras situaciones, se tragaron las certificaciones falsas para justificar la cortisona o las mentiras sobre el Actovegin.
No hay que olvidar que a lo largo de muchos años los patrocinadores principales del Tour eran los mismos de Lance, o eran traídos por él: ¿os acordáis de los premios de etapa con forma de botellita de Coca Cola o de los maillot Nike? Eso no valía para muchos otros, y cualquier miembro del mundo del ciclismo se enteraba perfectamente del poder que eso conllevaba.

Sabemos por los documentos USADA que Lance empezó a odiar a Pantani a partir del Tour de 2000 (y ya allí conseguía que los Kelmes trabajaran como sus gregarios personales en contra del italiano, véase la etapa de Courchevel). Ahora sabemos también que los organizadores del Tour decidieron no invitar nunca más al escalador italiano no por problemas de dopaje y droga (que ya existían en 2000, cuando le invitaron, o en 1999, cuando también le llamaron pero se negó él), sino por requirimiento directo del buen Lance. Lo mismo que pasó con Simeoni, entonces campeón italiano, en el Giro 2009.
No me consta que muchos ciclistas en la historia tuvieron una influencia parecida.

(...sigue...)

gabriele dijo...

(2/3)

La impunidad de la que gozaba Armstrong con su equipo le permitía tener unos gregarios "monstruos", y con eso controlar la carrera como nadie.
Es más facil tener "el equipo mejor" cuando te avisan media hora antes de cualquier control "sorpresa", lo que no consta que pasara a otros ciclistas, que sí se dopaban, claro, pero necesariamente con prudencia y por lo tanto límites bien mayores.
Y es más fácil tener "la estrategia mejor" cuando en el grupito de los diez-doce mejores, cinco o seis son los tuyos (y no porque sean todos grandes campeones en la montaña, vamos); es más fácil crear alianzas, cuando tus gregarios - y tú mismo! - tenéis muchas fuerzas "extras" a gastar para "castigar" a quienes, entre los adverarios, no se portan "como deben".

Bueno, esta impunidad era también una demostración para todos los otros de la amistad entre Lance y un señor llamado Hein Verbruggen, mira tú, el entonces jefe del UCI (y actual presidente honorario).
Pocos sabían que el señor Verbruggen tenía buenas cantidades de sus ahorros invertidos en el banco cuyo propietario era uno de los primeros patrocinadores de la USPostal, Thomas Weisel; pero muchos sabían que Lance hablaba a menudo con "Hein" por teléfono, y que el querido Hein era tristemente famoso por su frase (que queda en las actas de un juicio): "sabéis muy bien que yo puedo hacer que cualquier ciclista dé positivo [en los controles antidopaje] en cualquier momento".

¿Qué os parece, quizás esto ayude a la hora de manejar la estrategia de la carrera, no?

Sabemos también que Lance odiaba a Iban Mayo, por ejemplo, y gracias a la USADA ahora sabemos también (por interceptaciones, nótese, no por testimonios) que Armstrong había pedido a la UCI de machacarle con los controles. Tal vez nos acordemos ahora que Iban Mayo acabó su trayectoria profesional como uno de los ciclistas con el mayor número de "falsos positivos" (reconocidos por el TAS). Con eso no quiero decir que Mayo fuera limpio, pero que sin duda lo tenía bastante complicado, si incluso tuvo la suerte de ser cogido cuando las cosas tampoco estaban muy evidentes...

No son muchos los ciclistas que puedan definirse "amigos personales" de un par de presidentes de naciones del G8, y, por el camino, pedir a uno de ellos que quite del medio al director nacional de una agencia antidopaje, como hizo Armstrong pidiéndole a Sarkzozy que le liberara del molesto Bordry, el cual al parecer no se conformaba con las buenas viejas reglas del juego.

No voy a hablar de Livestrong, pero en la prensa de lengua inglés se puede leer algo diferente de las maravillas que damos por descontadas aquí (un ejemplo: http://www.outsideonline.com/outdoor-adventure/athletes/lance-armstrong/Its-Not-About-the-Lab-Rats.html?page=all).

gabriele dijo...

(3/3)

En conclusión, decir que Armstrong fue "una víctima de su época", en mi parecer, es (dicho sea sin ánimo de ofender) una pequeña bobería, de gente poco informada... puede ser una idea filosófica: puede decirse en sentido muy general, y aplicarse por lo tanto prácticamente a cualquier genio o monstruo de la historia; podemos decirlo para referirnos a conceptos teóricos como la codicia, el capitalismo, la manipulación del cuerpo, el ego postmoderno, ya, claro.
Sin embargo, si hablamos concretamente de ciclismo y de historia del ciclismo, Armstrong no fue una víctima sino uno de los creadores y de los elementos centrales de un sistema complejo y podrido.
Quizás tenía menos poder que Verbruggen (quizás), pero sabemos que tenía más poder que todo el pelotón junto, que los organizadores de carreras y en concreto del Tour, que las agencias antidopaje, que los directores deportivos...
No es casualidad que se le haya inculpado y condenado no tanto o no solo por dopaje, sino más bien por tráfico, acoso, y sobre todo "conspiration".

Vamos, nómbrenme otro ciclista (y casi diría deportista, pero no conozco tan en el detalle la política de otros deportes) que estuvo en su carrera en condiciones - ¡todas ellas! - semejantes.

Dicho todo esto, me parece necesario aclarar que yo también estoy bien convencido de que no se ganan siete Tour dopándose un poco más que los otros. Estoy perfectamente convencido de que Armstrong es un gran atleta, que tiene una determinación brutal, que es bastante astuto o se rodea de gente que lo es.

El problema es que, debido a todo lo demás, el "caso Armstrong" es tal vez uno de los poquísimos casos de la historia del ciclismo en que yo tenga fuertes dudas de que los resultados, en un mundo limpio, habrían sido los mismos.

Aparte de todo esto, si queréis hablarme de lo hipócrita que es el mundo del ciclismo, y del deporte en general, de cómo lo patrocinadores, los viejos compañeros, los periodistas, los organizadores, han abandonado a Lance, vale, perfecto, a ver... pero decir que Armstrong fuera "una víctima" más, que hacía o tomaba las mismas cosas que los otros ciclistas (las mismas tal vez sí, pero de otra forma: los otros sin aquella libertad), quiere decir no haberse enterado de mucho en la historia (y digo "historia" porque lo que he escrito está documentado, y en papeleo oficial, no en prensa amarilla) de este deporte desde hace un tiempillo, como diez o quince años.

Más que nada me parece un ultraje a la gran mayoría de los ciclistas que, limpios o no, pillados o no, ricos o no, de verdad pueden definirse víctimas porque la única elección que tienen es, muchas veces, dejar su deporte, vida y pasión o conformarse con lo que hay.
En cambio, Armstrong ERA... "lo que había" por ese entonces, y como he dicho, podía decidir muchas, muchas, muchas cosas.

Y lo hizo. El precio lo pagaron otros, para muchos fue bien caro. Si ahora le toca abonar un poco de calderilla a él también, pues perdonadme si no se me saltan las lágrimas.

Saludos muy cordiales,
Gabriele

Javier Sánchez-Beaskoetxea dijo...

Gracias por tu opinión, Gabriele. Y ya les gustaría a muchos escribir en castellano tan bien como tú.
Saludos

libardo landinez morales dijo...

estaba esperando poder leer su comentario acerca del caso Lance. sigo pensando que lance dejo muchas cosas para el ciclismo, tal vez no invento nada nuevo pero aplico muchas cosas que hoy por hoy se ven (por ejemplo el pedaleo de molinillo que llaman ustedes).Ver la seriedad de sus entrenamientos estoy seguro que puedo tomar los mismo que el y ni siquiera terminaria una carrera, entonces la diferencia no la va a dar el dopaje si no la forma como se busquen los objetivos. Otra cosa vivimos en una doble moral increible, empresas que hoy le dieron la espalda lo adoraron cuando ganaba, miren a ver si al ultimo de la lista de los corredores le ofrecen esos jugosos contratos, nosotros como espectadores queremos que todos los dias esten al 100 por ciento que nunca se queden que ganen siempre, que pedaleen rápido, para ver lentos nos vemos a nosotros mismos entonces cada dia les exigimos mas y mas. Tal vez suene a justificacion pero no lo es, si es bueno que el deporte sea limpio pero bueno el tiempo lo dira, esperemos haber que pasa

Saludos desde el otro lado del atlantico