miércoles, 21 de diciembre de 2011

Nuevos viajes para terminar un año interesante

A mediados de diciembre, entre el puente festivo y un viaje que me salió a última hora por un motivo relacionado con mi actividad como colaborador de la revista Pedalier, he podido terminar este año viajando de nuevo. Un placer.
Un año que comenzó con la operación fallida que me hicieron del Neurinoma del acústico en Madrid, y que siguió con varios viajes bonitos (Galicia, Lieja, Menorca, Pirineos, Tour de Francia, de nuevo Menorca,...). Además, este año han visto la luz dos libros míos: la guía de la Transpirenaica en bici por carretera "Gran Travesía de los Pirineos en bici", y mi novela "Y, sin embargo...". No me puedo quejar.
Ahora he estado unos días con mi hijo en Andalucía, concretamente en Cádiz y Sevilla, y con una muy bonita visita a Gibraltar, muy interesante lugar. Este viaje me ha permitido conocer lo bonitos que son Cádiz y Sevilla y he recordado viejos tiempos, cuando, navegando, estuve en el puerto de Cádiz y fondeado en la bahía de Algeciras, bajo el peñón, como los barcos que he visto esta vez desde arriba.
Luego he tenido la ocasión de disfrutar enormemente de unos días en Las Playitas, en Fuerteventura (Canarias), invitado por Windjammer Sports, una nueva empresa de unos amigos para organizar actividades de entrenamiento para ciclismo, running y duatlón. El lugar, la verdad, es que es inmejorable para ir a entrenar, con buen tiempo asegurado. Espero regresar pronto.
Y para el 2012,... Pues aún no lo sé. No sé si me tocará operarme de nuevo o esperaremos un año más. Por ahora tengo como objetivos deportivos el hacer la París Roubaix cicloturista y repetir la Luchón Bayona. Y tal vez iré al Maratón de Nueva York si puedo correr sin lesiones. Me apetece.
Por cierto, se me olvidaba un comentario muy importante: todas estas actividades las he compartido con viejos y nuevos amigos. Lo he pasado muy bien.





























2 comentarios:

Julen dijo...

Espero ansioso las crónicas de todo lo que hagas en el 2012. Por cierto, buenísimo el libro de la Transpirenaica. Me lo he leído dos veces casi como si fuera una novela, imaginándome los caminos, los puertos, los pueblos... ¡enhorabuena!

Javier Sánchez-Beaskoetxea dijo...

Eso es afición, leerte el libro dos veces, joe. Ahora a hacer el viaje aunque sea una vez.

saludos,